Capitulo 6: Método de utilización del inventario

Al despertarme, no puedo evitar si envejecer está haciendo que me levante más temprano últimamente. También puede ser porque me fui a dormir muy temprano.

Mientras frotaba mis somnolientos ojos, me tropecé con algo de camino al baño. Con un ruidoso golpe, una pila de novelas colapsó y se desparramó por el suelo.

Adoro las novelas ligeras, he comprado una gran cantidad de ellas con el pasar de los años. Tengo tantas que tengo que apilarlas a los lados del librero. A mi librero simplemente ya no le caben más. De hecho, ya casi completo la tercera pila de novelas ligeras.

Hace un tiempo, hubo un terremoto bastante grande a mitad de la noche y una de las pilas de novelas ligeras colapsó justo en mi cara. Aún duele cuando pienso sobre eso.

Después de volver del baño, miré la torre de novelas ligeras desparramada por el suelo. ¿Debería comprar otro librero? ¿O tal vez debería venderlas a una tienda de libros de segunda mano? ¡No, no! ¿Qué haría si de repente quisiera volver a leer alguna después de venderla?

¡PIKON!

Una vez más, sentí como si una lamparita se encendiera sobre mi cabeza.

¡Todo se resolvería si simplemente las pongo todas en mi inventario!

Ya que hoy no tengo que ir a trabajar, con nada más que hacer, decidí comenzar a limpiar la habitación.

Después de un rato, finalmente terminé de almacenar todas las novelas ligeras en el inventario. Una idea inesperadamente útil se me vino a la mente. Siempre leo novelas ligeras de camino al trabajo. Pero cualquier libro que ponga en mi mochila, si lo leo relativamente rápido, lo termino antes de llegar a casa. Sería un verdadero desastre leerlo una y otra vez. Sin embargo, si pongo todas mis novelas ligeras en el inventario, tal desastre jamás volverá a ocurrir.

El otro lado positivo es que cuando vaya a la tienda a comprar más novelas, nunca compraré una que ya tenga en mi colección.

Después de terminar la limpieza de las novelas ligeras, recordé una misión muy importante.

Debo espi-AHEM
¡Debo monitorear a la Princesa Elena!

Debe ser duro oponerse al rey. ¡Salvar a la princesa es el deber del héroe!

Secretamente active mi magia de [Rastreo].

Incluso desde otro mundo, la magia de [Rastreo] funciona confiablemente y soy capaz de ver la situación actual de Elena.

Si la Princesa Elena está tomando un baño, su inmodesta figura será… tal cosa no pasó. Ella estaba leyendo un libro mientras bebía té elegantemente. A diferencia de las vulgares novelas ligeras de harem que leo, estoy seguro de que su libro es sano y refinado.

Por alguna razón, estar espiándola se siente patético, así que silenciosamente detuve mi magia de [Rastreo]. Bueno, ya que no parece haber nada particularmente peligroso, debería estar bien.

Aún es temprano por la mañana, así que continué limpiando la habitación. Dicho eso, lo que estoy haciendo es simplemente poner las cosas de mi habitación en mi inventario. ¡Esto es tan fácil! ¡De hecho es demasiado fácil!

Para el final de la mañana, todo el desorden de mi habitación se había ido. ¿Cuántos años han pasado desde que mi cuarto estuvo así de ordenado?

Mientras miraba mi habitación limpia, sentí que mi estómago rugía. Intenté buscar algo en el refrigerador pero solo había pilaf congelado. Calenté el pilaf congelado envuelto en plástico en el microondas y lo puse en un plato. Lo comí felizmente mientras sorbía sopa wakame.

Mientras comía el pilaf, espíe lo que Elena estaba haciendo como si estuviera mirando TV.

La Princesa Elena se sentó sola en una gran mesa, teniendo un elegante almuerzo mientras era observada por un gran número de sirvientas. Parece que no hay diferencia horaria entre ese lugar y Japón.

Después de tomar un descanso y terminar de almorzar, recordé que no quedaba nada en el refrigerador y decidí ir al supermercado. Dicho eso, ¡ahora tengo mi inventario! Incluso si compro una bolsa de 10kg de arroz, no tendría problemas para cargarlo a casa. Incluso si compro mis comidas congeladas favoritas, ni siquiera tengo que apresurarme a casa ya que no se derretirán una vez que las ponga en mi inventario. ¡Ni siquiera tengo que preocuparme por poner lo que compre en el refrigerador! ¿Siquiera necesito un refrigerador? ¡No, aún mejor, debería ser aún más eficiente comprar en el supermercado que vende comestibles para negocios! Ahí los comestibles son increíblemente baratos pero tienes que comprarlos en grandes cantidades. Incluso si es una gran cantidad, los objetos con su tiempo detenido en mi inventario nunca caducarán.

Yendo de un supermercado al otro, me aprovisioné de dulces y comestibles, volviendo a mi habitación con satisfacción.

Con el asunto de las compras finalizado, preparé un poco de café y tomé un descanso.

Recordando mi misión de ‘monitorear’ a la Princesa Elena, revisé el video.

La Princesa Elena está…

Aprisionada y llorando…

¡¿Cómo demonios pasó esto?!

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