Capitulo 18
En la entrada frontal del Castillo del Rey Demonio, dos Armaduras Mágicamente Operadas estaban haciendo guardia.
Ahí, un Majin usando el uniforme del Ejército Occidental apareció junto con la luz de Transferencia.
«¡¿Quién eres?!»
«¡Soy Dolnois, pertenezco al Ejército Occidental! ¡Vengo con un mensaje verbal urgente de parte del General Occidental Sancreed-sama!»
Escuchando las palabras del hombre que se hacía llamar Dolnois, las Armaduras Mágicamente Operadas lo miraron con escrutinio de arriba abajo.
Su uniforme sin duda era el estilo oficial del Ejército Occidental.
Normalmente, era necesario llevar una carta oficial, pero en casos de emergencia, estaba bien omitir eso.
A cambio, estaba la condición de que debían aparecer en un lugar específico con Transferencia.
En otras palabras, si aparecían en otro lugar que no fuera el designado, era posible determinar que se trataba de un impostor o intruso.
Más que una revisión para ver si un Mazoku era un soldado real, era una medida contra el Héroe que podría aparecer algún día.
Luego de confirmar que el hombre había aparecido en el lugar designado para el Ejército Occidental, asintieron y abrieron paso.
«¡Puedes pasar!»
Recibiendo esas palabras, Dolnois ingresó al Castillo del Rey Demonio.
«¡Este es un reporte urgente de Dolnois-dono, perteneciente al Ejército Occidental!»
Las palabras de las Armaduras Mágicamente Operadas resonaron en la recepción. Un hombre que notó eso caminó frente a Dolnois.
«Hey, buen trabajo. Soy Orel, pertenezco al Ejército Central. ¿Entonces eres un mensajero?»
«Soy Dolnois, pertenezco al Ejército Occidental. ¡He venido con un mensaje verbal urgente de Sancreed-sama para el Rey Demonio-sama!»
«El Rey Demonio-sama salió a hacer una inspección. Por el momento te escucharé yo.»
«No, pero…»
«¿Qué demonios, no soy suficiente para ti?»
Orel fulminó con la mirada al serio Dolnois. Ambos tenían argumentos razonables.
Orel técnicamente pertenecía al Ejército Central, y además, su puesto era en el Castillo del Rey Demonio.
Orel ciertamente era adecuado para recibir mensajes verbales cuando el Rey Demonio estaba ausente… pero, a Dolnois le habían confiado un mensaje verbal urgente para Vermudol, así que no podía juzgar si estaba bien reportarlo a alguien aparte del Rey Demonio.
«O-kay, okay, Orel, tú ve para alla-. Soy Rokuna, la guardiana de la biblioteca-. Ya que es verdad que el Rey Demonio-sama no está aquí, yo te escucharé. Si no estás satisfecho con eso, entonces tendrás que ir a la parte trasera y reportarselo al General Central. ¿Qué harás?»
«… S-Sí señora. ¡Entonces, primero se lo reportaré a usted, Rokuna-sama!»
«Demasiado serio-, parece que saldrás perdiendo en la vida-. ¿Entonces?»
Tal vez porque tenía una idea de lo que Rokuna quería decir, el rostro de Dolnois se distorsionó un poco, pero recuperando la compostura, se arrodilló tomando la postura para hacer el reporte.
«¡Este es un reporte urgente del General Occidental Sancreed Sama para el Rey Demonio Vermudol-sama! ¡En las tierras occidentales, un objeto gigantesco no identificado apareció en la ‘Costa de la Invasión’! ¡Miembros de la humanidad que se hacían llamar Metalio viajaban en él y están buscando rescate! ¡Ahora mismo, Sancreed-sama está en contacto directo con ellos!»
Escuchando los contenidos del reporte, Orel y Rokuna arquearon las cejas.
‘Costa de la Invasión’.
Era la costa más al oeste que estaba asociada al día en que el Héroe invadió.
Ahí había aparecido un gigantesco objeto no identificado.
«Ese objeto no identificado, ¿cómo era?»
«¡Sí, nunca había visto algo parecido, y puesto que no tengo otra forma de expresarlo, parecía estar flotando en el mar!»
«H-n, ¿podría ser tecnología de la humanidad? Aunque también está la posibilidad de que sea algo único de los Metalio.»
«Más bien, ¿cruzaron el ‘Mar de los Confines Más Lejanos’?»
«Buscaban rescate, ¿verdad? ¿Significa que no salieron bien parados?»
Diciendo eso, Rokuna pensó.
Seguramente, en el caso de Sancreed, la conversación probablemente fluiría hacia la aceptación.
Y Rokuna estaba de acuerdo con eso.
Si eran Metalio, por el momento, no había posibilidad de que se tratara del Héroe.
El hecho de que la Invocación del Héroe se hacía a través del poder del Dios de la Vida- es decir, el hecho de que el Héroe no era un Semi-Humano era claro en los libros que Vermudol trajo del territorio de la humanidad.
En ese caso, seguramente era verdad que los Metalio estaban pidiendo ayuda.
«Bueno, el problema es… qué vinieron a hacer, ¿verdad?»
Venir solo porque querían llegar aquí, al Continente Oscuro… El ‘Mar de los Confines Más Lejanos’ no era un lugar tan permisivo. Era por eso que el Continente Oscuro seguía manteniendo una cultura distintiva.
Ese ‘algo’ que los Metalio usaban para viajar probablemente era una pista para explicar ese misterio.
En ese caso, era necesario explicar esa tecnología, y dependiendo de la situación, sería necesario absorberla.
«Nn-… Resultó ser algo muy molesto, ¿verdad?»
Luego de pensarlo, llegó a una conclusión.
Ya que la historia era demasiado importante para que Rokuna se encargue sola, no había otra opción que reportarselo al mismo Vermudol.
Era algo que ella misma lo había enviado a hacer, pero Vermudol tenía que terminar con la observación de la ciudad y volver tan pronto como fuera posible.
Este era un evento importante que afectaría a todo el Reino Zadark.
«No hay nada que hacer. Orel, ve a buscar a Ver-cchi.»
«Claro, bueno… supongo que debería.»
Tanto Orel como Rokuna querían dejar que Vermudol descansara al menos hoy… pero era imposible en esta situación.
«Bueno, me voy. Mensajero-dono, perdón pero espere un poco.»
«Sí señor.»
Luego de ver que Dolnois asintió, Orel se dio la vuelta y salió corriendo del castillo.
«… ¿Estará bien solo?»
«¿Nn? Ah-, está bien.»
Escuchando la razonable pregunta, Rokuna respondió despreocupadamente.
«Nadie le gana a Orel buscando a alguien.»
Había una razón para que ese tipo sirva en el Castillo del Rey Demonio.
Diciendo eso, Rokuna sonrió.
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